de la región caribe está llena de sabor y color; la fertilidad de las tierras caribeñas colombianas permite que se cultiven todo tipo de frutas, verduras y legumbres y su proximidad al mar permite que los frutos del mar se sirvan siempre en la mesa con diferentes toques de la cocina europea, africana y criolla como fiel expresión de una historia de siglos, con un rico intercambio de culturas, costumbres y tradiciones de pueblos tan diversos, que desde lejanos países de Europa, África y Asia, unidos a los propios aborígenes americanos, han conformado un singular perfil en los países que hoy integran la región.